viernes, 12 de octubre de 2007

“Say thirty three = diga treinta y trés”


De vuelta en El Salvador, pasé sólo una noche disfrutando los regalos que me mandaron y al día siguiente ya volví a salir. Me había anotado para ayudar como traductora en una campaña médica de unos médicos gringos después de un anuncio en la Iglesia Bautista de Miramonte, a donde asisto con la flia Rodriguez.

Fui porque tenía el tiempo y el conocimiento para poder hacerlo, y las ganas de conocer la gente del oriente de El Salvador. Me volví totalmente renovada. Fue una experiencia hermosa; el tiempo que pasé con el grupo de yanquis (gringos) fue una bendición total, y visitar las comunidades también. Por donde lo mire, precioso.


El viaje duró 10 días, y consistió básicamente en llegar con este grupo de 30 doctores (entre otras cosas….también había dentistas, oftalmólogos, gente que trabajaba con los niños, y que cortaba el pelo) a instalar una pequeña y sencilla clínica en la escuela del lugar. La comunidad estaba avisada hace tiempo, así que podía acercarse a atenderse, recibir alguna medicina, cortarse el pelo y también tener un tiempo para entretener a los niños.

Empezamos por un lugar cercano a San Miguel, luego cercano a San Francisco Gotera, y después ya nos fuimos para Cacaopera y un lugar aún más escondidito, en las montañas. En total, atendimos a más de 2500 pacientes.

A mí me tocaba traducirle a Jo, esta dulce enfermera pediátrica con la que recibíamos a familias enteras. Venía en general la madre con algunos de sus chicos, me decía qué le dolía a cada uno, y yo después traducía. Fue muy lindo…y entretenido también. No solo por estar traduciendo del español al inglés, sino tambien del salvadoreño del campo al español más neutral…escuché cada frase!! “Es que usté sabe, a la noche se me tranca el bolgo”, “me duele la rabadilla”… “me agarra la prima”… “me culebrea la barriga” jajaja.

De tanto escuchar en general los mismos problemas y medicarles algunas cosas, me aprendí varias cuestiones de medicina, síntomas comunes, etc. Con Jo (“Josephine”) nos divertimos mucho también. Por momentos el calor era insoportable, y por momentos personalmente me agotaba tener que entenderles el acento y adaptar el mío para que me entiendan… pero cada día estuvo genial.

Compartimos mucho de la palabra de Dios, uno de los objetivos principales del viaje misionero de esta gente. Muchas personas tuvieron la oportunidad de escuchar un mensaje nuevo, el que separa a Jesús de la religión (católica, evangélica, etc.) y lo ubica exactamente donde quiere estar: en la vida de las personas que quieran conectarse con Dios de una manera personal y tierna.

De este grupo aprendí muchísimo, y me encantó que siendo yanquis se adaptaran muy bien a la cultura y a las pocas comodidades que tuvimos por momentos. También me llevé muchos amigos, entre los cuales hay unas chicas de Honduras y Nicaragua. Pienso visitarlas cuando vaya por allí.

Margaret

También estuvo muy lindo conocer a Margaret. Ella tiene una ONG, que además es su ministerio en la iglesia, de oración por las naciones y ayuda a los necesitados. Va enseñando y animando a las personas a orar, y su presencia en el grupo me pareció fundamental. Este es Juan, el doctor más joven del grupo, con el que también nos hicimos muy amigos. Habla muy bien español y pudimos conversar bastante.

Espero poder volver verlos a todos algún día!

Juan, fotógrafo oficial porque me olvidé la cámara y una de las personas
con quien más me encariñé

Ya volví a San Salvador, a sentirme como en mi casa con la familia Rodriguez nuevamente. En unos días dejaré de amagar y finalmente empezar a hacer surf, y después definir para dónde sigo mi viaje.

Al lector evange, le pido que esté orando por sabiduría para decidir por dónde seguir la ruta, además de mi economía. Estoy extendiendo el viaje y más tiempo significa más dinero también. Dios sabe que estoy con ese tema en la cabeza y los gringos de la nada me sorprendieron con una excelente noticia: cuando se iban nos dejaron a cada uno de los traductores U$D 200.- de ofrenda por nuestra ayuda. Me llegó al corazón, porque sumado a lo que otras personas me acercaron del grupo (y que no me dejaron rechazarles), sumé casi la suma que había gastado el último mes. INCREIBLE! Así que les pido que sigan orando.

También me tiene un cachín preocupada en qué lugar voy a pasar las fiestas. Por lo pronto, será lejos de la familia, y no tengo claro en qué ciudad ni país aún…por lo que les pido que me acompañen orando para que salgan lo más lindas posibles.

Algunas otras imágenes del viaje...


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay cosas que quedan claras:

1) Salvo los que te conocen, la gente no me va a creer cuando diga "Si, mi hermana está traduciendole a a unos doctores yanquis que ayudan en El Salvador... y la semana siguiente seguramente va a aprender surf, como para contrarrestar un poco con la experiencia que tuvo con los monos aulladores..."

2) Los Yanquis tienen alguna especie de contrato implicito con la industria de la fotografía... salen bien en todas las fotos!

Anónimo dijo...

Maggie, I'm going to attempt to do some translation of your blog so I can see what you had to say. It looks like the use of all the pictures worked well.
love ya, Jo